Statement by the UN LGBTI Core Group
Delivered by H.E. Yoka Brandt, Permanent Representative of the Kingdom of the Netherlands
April 23, 2024
President,
I have the honour to deliver this statement on behalf of the Member States of the UN LGBTI Core Group[1].
The UN LGBTI Core Group’s overarching goal is to work within the United Nations framework to ensure universal respect for the human rights and fundamental freedoms of all individuals without distinction, regardless of their real or perceived sexual orientation, gender identity or sex characteristics, including lesbian, gay, bisexual, transgender and intersex (LGBTI) persons. Our particular focus is on protecting LGBTI persons from violence and discrimination.
Two years ago, the UN LGBTI Core Group raised our concerns that despite the frameworks put in place by the Security Council to prevent and address sexual and gender-based violence in conflict, the level of compliance by parties to conflict remains insufficient, and impunity prevails.
We are deeply troubled that despite consistently raising our concerns, conflict-related sexual violence against LGBTI persons persists.
We reiterate that sexual violence against all persons is prohibited under international humanitarian law and is a violation of international human rights law. It does not discriminate against gender identity and sexual orientation, and all persons must be protected. We call on all parties to conflicts to respect international law.
Perpetrators of conflict-related sexual violence often assume LGBTI persons will not have their rights guaranteed and will have little access to justice mechanisms. We are here to tell them that they are wrong.
Victims and survivors of conflict-related sexual violence are not a homogenous group. Women, girls, men, boys, persons of diverse gender identities, persons with diverse sexual orientations, as well as persons living with disabilities, have all been targeted by armed actors. The majority of them come from socioeconomically marginalized communities.
Last year, the UN Secretary-General identified in his report, lesbian, gay, bisexual, transgender, queer, and intersex persons being at ‘serious risk of sexual violence in conflict-affected and displacement settings’. This year, the Secretary-General reports the risk as ‘acute’, signifying increased risks of conflict-related sexual violence experienced by LGBTI persons.
As stated by the Secretary-General, member states need to undertake ‘an intersectional analysis and a tailored, survivor-centred approach’ to address conflict-related sexual violence. We must also build forensic capacity to strengthen investigations and accountability for perpetrators.
Today, we encourage all member states to again review their legal frameworks so that collectively we adequately address the needs of survivors, in all their diversity, with a tailored survivor-centred approach. This includes access to justice and remedy, as well as to essential health services, including sexual and reproductive health. This means changes in legislation, and de-criminalisation of LGBTI persons. It means addressing the chronic underreporting and documentation of conflict-related sexual violence and making it easier to report cases of violence against LGBTI persons without fear of reprisals. We also encourage member states to develop and invest in long-term partnerships with LGBTI civil society organisations to monitor, report and deliver support services to LGBTI survivors of conflict-related sexual violence.
The UN LGBTI Core Group reiterates the importance of ensuring universal respect for the human rights and fundamental freedoms of all individuals without distinction. We will empower survivors by prioritizing their specific needs, perspectives and aspirations, and consider intersecting inequalities, including sexual orientation and gender identity. LGBTI survivors’ rights must be respected and will be protected.
I thank you.
[1] UN LGBTI Core Group members: Albania, Argentina, Australia, Belgium, Bolivia, Brazil, Cabo Verde, Canada, Chile, Colombia, Costa Rica, Croatia, Denmark, Dominican Republic, Ecuador, Finland, France, Germany, Honduras, Iceland, Ireland, Israel, Italy, Japan, Luxembourg, Malta, Mexico, Montenegro, Nepal, New Zealand, North Macedonia, the Netherlands, Norway, Peru, Portugal, South Africa, Spain, Sweden, Timor Leste, the United Kingdom of Great Britain and Northern Ireland, the United States of America, and Uruguay and the European Union, as well as the Office of the UN High Commissioner for Human Rights, and the non-governmental organizations Human Rights Watch and Outright International.. The group is co-chaired by Argentina and the Kingdom of the Netherlands.
Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas Debate abierto sobre la violencia sexual relacionada con los conflictos
Declaración del Grupo Principal LGBTI de la ONU
Abril 23 de 2024
Presidente,
Tengo el honor de pronunciar esta declaración en nombre de los Estados miembros del Grupo Principal LGBTI de las Naciones Unidas[1] .
El objetivo general del Grupo Principal LGBTI de la ONU es trabajar en el marco de las Naciones Unidas para garantizar el respeto universal de los derechos humanos y las libertades fundamentales de todas las personas sin distinción, independientemente de su orientación sexual, identidad de género o características sexuales reales o percibidas, incluidas las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI). Nos centramos especialmente en proteger a las personas LGBTI de la violencia y la discriminación.
Hace dos años, el Grupo Principal LGBTI de la ONU planteó nuestra preocupación por el hecho de que, a pesar de los marcos establecidos por el Consejo de Seguridad para prevenir y abordar la violencia sexual y de género en los conflictos, el nivel de cumplimiento por las partes en conflicto sigue siendo insuficiente, y prevalece la impunidad.
Nos preocupa profundamente que, a pesar de plantear constantemente nuestras preocupaciones, persista la violencia sexual contra las personas LGBTI relacionada con los conflictos.
Reiteramos que la violencia sexual contra todas las personas está prohibida por el derecho internacional humanitario, y constituye una violación del derecho internacional de los derechos humanos. No discrimina la identidad de género ni la orientación sexual, y todas las personas deben ser protegidas. Pedimos a todas las partes en conflicto que respeten el derecho internacional.
Los perpetradores de violencia sexual relacionada con los conflictos suelen dar por sentado que las personas LGBTI no verán garantizados sus derechos y tendrán poco acceso a los mecanismos de justicia. Estamos aquí para decirles que se equivocan.
Las víctimas y los supervivientes de la violencia sexual relacionada con los conflictos no son un grupo homogéneo. Mujeres, niñas, hombres, niños, personas de diversas identidades de género, personas con diversas orientaciones sexuales, así como personas que viven con discapacidades, todos han sido blanco de los actores armados. La mayoría de ellos proceden de comunidades marginadas socioeconómicamente.
El año pasado, el Secretario General de la ONU señaló en su informe que las personas lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, queer e intersexuales corrían “grave riesgo de violencia sexual en situaciones de conflicto y desplazamiento”. Este año, el Secretario General califica el riesgo de “grave”, lo que significa que las personas LGBTI corren un mayor riesgo de sufrir violencia sexual relacionada con los conflictos.
Como ha declarado el Secretario General, los Estados miembros deben emprender “un análisis interseccional y un enfoque adaptado y centrado en el superviviente” para abordar la violencia sexual relacionada con los conflictos. También debemos crear capacidad forense para reforzar las investigaciones y la rendición de cuentas de los autores.
Hoy animamos a todos los Estados miembros a que revisen de nuevo sus marcos jurídicos para que, de forma colectiva, abordemos adecuadamente las necesidades de los supervivientes, en toda su diversidad, con un enfoque adaptado y centrado en ellas. Esto incluye el acceso a la justicia y a la reparación, así como a los servicios sanitarios esenciales, incluida la salud sexual y reproductiva. Esto implica cambios en la legislación y la despenalización de las personas LGBTI. Significa abordar la crónica falta de denuncias y documentación de la violencia sexual relacionada con los conflictos y facilitar la denuncia de casos de violencia contra personas LGBTI sin temor a represalias. También animamos a los Estados miembros a desarrollar e invertir en alianzas a largo plazo con organizaciones de la sociedad civil LGBTI para supervisar, informar y prestar servicios de apoyo a los supervivientes LGBTI de la violencia sexual relacionada con los conflictos.
El Grupo Principal LGBTI de las Naciones Unidas reitera la importancia de garantizar el respeto universal de los derechos humanos y las libertades fundamentales de todas las personas sin distinción. Empoderaremos a los supervivientes dando prioridad a sus necesidades, perspectivas y aspiraciones específicas, y tendremos en cuenta las desigualdades que se entrecruzan, incluidas la orientación sexual y la identidad de género. Los derechos de los supervivientes LGBTI deben ser respetados y serán protegidos.
Muchas gracias.
[1] Miembros del Grupo Principal LGBTI de la ONU: Albania, Argentina, Australia, Bélgica, Bolivia, Brasil, Cabo Verde, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Croacia, Dinamarca, República Dominicana, Ecuador, Finlandia, Francia, Alemania, Honduras, Islandia, Irlanda, Israel, Italia, Japón, Luxemburgo, Malta, México, Montenegro, Nepal, Nueva Zelanda, Macedonia del Norte, Países Bajos, Noruega, Perú, Portugal, Sudáfrica, España, Suecia, Timor Oriental, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, los Estados Unidos de América y Uruguay y la Unión Europea, así como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y las organizaciones no gubernamentales Human Rights Watch y Outright International. El grupo está copresidido por Argentina y el Reino de los Países Bajos.